Historia del Tianguis de Tonalá

Una tradición viva desde hace siglos

El tianguis (del náhuatl tianquiztli, que significa «mercado») es una forma de comercio que ha existido en Mesoamérica desde tiempos prehispánicos. Este sistema de mercado no sólo ha perdurado durante siglos, sino que ha evolucionado y se ha adaptado a los distintos contextos sociales, manteniéndose como un elemento vital de la vida cultural y económica en México.

Los tianguis son herederos de las prácticas comerciales de las civilizaciones mesoamericanas como los mexicas, zapotecas, tonaltecas y tecuexes. Estas tradiciones se mezclaron posteriormente con influencias de los bazares del Medio Oriente, introducidas a América por los españoles.

En el siglo XV, era común que los tianguis se organizaran periódicamente en plazas de ciudades importantes como Tenochtitlán, Texcoco, Huejotzingo o Tlaxcala, donde miles de personas acudían para intercambiar productos mediante trueque o utilizando semillas de cacao como moneda. Las crónicas de la conquista —como las de Bernal Díaz del Castillo y Hernán Cortés— describen mercados organizados por calles de productos, con jueces que vigilaban las transacciones para garantizar justicia.

El Tianguis de Tonalá

En el caso específico de Tonalá, Jalisco, las raíces del tianguis se remontan a los pueblos originarios del Valle de Atemajac, especialmente los tonaltecas, que ya realizaban intercambios de productos en la plaza central del pueblo. Basándonos en los ciclos calendáricos mesoamericanos y registros históricos, se estima que esta tradición podría haber iniciado alrededor del siglo XIII; por ello, como fecha simbólica de fundación del Tianguis de Tonalá se reconoce el jueves 6 de enero del año 1250, reflejando no sólo su antigüedad, sino su profunda conexión con la identidad cultural de la región.

A través de los siglos, el tianguis de Tonalá ha sido un punto de encuentro entre productores y compradores, entre tradición y renovación. Aunque en los últimos años han aparecido productos no artesanales y de importación, la artesanía tradicional sigue siendo la esencia del mercado: cerámica, alfarería, vidrio soplado, papel maché, textiles, muebles tallados y una diversidad de expresiones hechas a mano que representan a México en cada forma y color.

El tianguis tiene lugar cada jueves y domingo, y se extiende por varias avenidas, entre ellas Tonaltecas y el Periférico. También es un lugar donde conviven la música tradicional, la gastronomía mexicana y una energía colectiva única.

Una experiencia que va más allá de comprar

Más que un mercado, el Tianguis de Tonalá es una experiencia viva, visual y sensorial. Sus colores, sonidos, aromas y sabores reflejan el alma de Jalisco. No es casualidad que artistas como Diego Rivera o Rufino Tamayo hayan retratado estas escenas en sus obras: los tianguis representan lo más auténtico del México popular.

Fotos Antiguas del Tianguis Artesanal de Tonalá